RESEÑA MARZO 2018: CLASE DE FERNANDO VITALE
La primera clase del
curso anual 2018 “Síntoma y Sinthome” de la Delegación de Ushuaia estuvo a
cargo de Fernando Vitale. En primer lugar, realizó una introducción al programa
de estudio que le brinda continuidad a las cuestiones trabajadas en el curso
anterior.
A partir de una referencia
del Seminario 21, destacó las palabras de Lacan que nos hablan de un
“recomienzo”, entendido como si fuera un pase. Lacan pone todo lo anterior
entre paréntesis, encontrando un punto exterior que es el nudo borromeo.
Señala precisamente la
importancia de darle relevancia al cambio de perspectiva que introduce Lacan al
final, posición que incide en cómo concebimos la práctica del psicoanálisis
mismo.
Luego, brevemente,
recordó algunas puntuaciones del recorrido del curso anterior. Indicando que lo
simbólico deja de concernir únicamente a la estructura del lenguaje, sino que
con lalengua, aparece el efecto
parasitario del significante sobre el cuerpo, sus efectos de goce. Respecto de
lo imaginario, en el nudo,queda ubicado particularmente en el goce del cuerpo.
Diferenció, entonces, siguiendo a Lacan en “La tercera”, este goce del cuerpo
del goce fálico pulsional, un goce fuera-de-cuerpo. El síntoma, en tanto viene
de lo Real y posee un valor singular y contingente,es el que anuda el cuerpo.
El cuerpo de la clase
lo constituyeron dos referencias del Seminario 5 donde encontramos una
articulación notoria que las concepciones posteriores. La primera se ubica en
la página 474: “El famoso traumatismo… Es algo de la vida que se le manifiesta
a sí misma como significante en estado puro y no puede articularse de ninguna
manera ni resolverse”. Sorprende que, en plena construcción del grafo del
deseo, Lacan aluda al “significante en estado puro”, su vertiente traumática, concepción muy alejada del campo de la represión.
La segunda cita es de
la página 255: “es preciso para comprender qué hace que el significante, tan
pronto es introducido, tenga un valor doble… porque él es quien resulta
abolido, y no el otro, con el látigo imaginario y, por supuesto, significante”.
Se revela nuevamente un estatuto del significante que no implica la
articulación con el sentido, muy por el contrario es conducido por sus efectos de
goce en el cuerpo.
A partir de ambas
referencias se produjo un intercambio muy interesante con el auditorio que
posibilitó una permanente interrelación entre los diferentes momentos de la
enseñanza de Lacan.
Comentarios
Publicar un comentario